Era el último deporte de equipo que faltaba por llegar a Pekín, pero ayer los chicos de la Selección Española de Baloncesto llegaron a la capital china para unirse al resto de la expedición nacional y alojarse por fin en la Villa Olímpica.
En principio la llegada fue tranquila, con muchos fans y medios de comunicación que recibían a los actuales Campeones del Mundo, pero la euforia se desató con la llegada de Pau Gasol. Un recibimiento de auténcia estrella que dejó alucinado al propio protagonista y al resto de sus compañeros.
Él, junto al resto de sus compañeros, llegaban procedentes de Shangai con ganas de llegar a la Villa Olímpica y unirse al resto de los deportistas. Desfilaron por el Canal Olímpico, habilitado en el aeropuerto para este acontemiento deportivo, con Marc Gasol a la cabeza, pero la locura total llegó con Pau que tardó media hora en recorrer los metros que le separaban del autobus. Entres flases y autógrafos de los emocionados fans asiáticos reconoció que no esperaba un recibimiento tan importante.
Que teman sus rivales, los «Golden Boys» ya están en Pekín.
foto: Feb