El Madrid hizo el ridiculo ayer en el partido de semifinales de la Supercopa de España ante el Barcelona, y es que en el tercer cuarto llegó a perder de 40 puntos, además de dar una imagen derrotista y pasiva. Los jugadores del Barcelona no tuvieron piedad del Madrid y siguió manteniendo la intensidad, tanto en ataque como en defensa, donde se hicieron dueños del rebote.
Morris y Navarro ejecutaron al Madrid desde la nueva línea de tiros de tres puntos, y es que estos dos jugadores pillaron la medida a 6,75 y sumaron 16 y 6 puntos respectivamente. Ricky Rubio llevó el peso del juego, dejando muy tocado al nuevo fichaje del Real Madrid, Sergio Rodríguez que merece una mención a parte.
Ni Tomic, ni Velickoiv ni tan siquiera Carlos Suáres estuvieron a la altura del partido, y es que en el tercer cuarto llegaron a encajar un parcial de 21-0 en el marcador. Tan solo Sergi Vidal se pudo ir contento del partido, porque la afición le ovacionó cuando salió a la pista.
Etore Messina tiene que cambiar la estrategia y ponerle las pilas a estos jugadores, ya que parece que no van a jugar como un equipo.
