Anny Piña, con más de 17 años de experiencia en la enseñanza del idioma francés, se ha convertido en una figura destacada en el ámbito académico. Su trayectoria abarca desde Venezuela hasta los Estados Unidos, con un enfoque claro en resaltar que el francés es más que un simple idioma; se trata de una herramienta esencial para la cultura, los negocios y las relaciones internacionales.
Su pasión por el francés comenzó en la Universidad de Los Andes en Venezuela, donde se especializó en fonética, un campo que la ha llevado a dotar a sus alumnos de la confianza necesaria para comunicarse. A lo largo de su carrera, Anny ha enriquecido su formación en Francia, alcanzando reconocimientos en instituciones como el Instituto Greta Beaujolais y la Universidad Católica de Lyon, lo que ha influido en su método docente.
Un rasgo distintivo de Anny es su habilidad para personalizar el aprendizaje. «Cada alumno tiene objetivos distintos, y mi labor es adaptar las clases a esos intereses», menciona, lo que le ha ganado el aprecio de sus estudiantes por su claridad y capacidad de motivación.
Además de su labor en el aula, su labor en Venezuela incluye ser profesora titular y conferencista, logrando generar un impacto significativo en la enseñanza del francés en el país. Su resiliencia y capacidad de innovación se hicieron evidentes en 2016, cuando adoptó la enseñanza online, una decisión que le permitió consolidar un modelo educativo efectivo que combina lo presencial y lo remoto.
En Estados Unidos, especialmente en Florida, Anny ha encontrado un espacio propicio para su misión educativa. Con la creciente población francófona en la región, su papel se vuelve crucial para aquellos que desean ampliar sus horizontes laborales en un entorno globalizado.
Desde Orlando, Anny integra la enseñanza presencial y remota, y su visión es formar profesionales que entiendan el francés como un recurso clave para el desarrollo global. Para ella, no hay barreras en el aprendizaje, sino múltiples caminos hacia un objetivo común: abrir puertas y crear oportunidades. Su mensaje para quienes consideran aprender el idioma es claro: «Aprender francés es apostar por el futuro».
