El Athletic de Bilbao quiere hacer historia y esto pasa por eliminar al Sporting de Lisboa y de esta forma pasar a la final de la Europa League que se disputará en Bucarest. Para poder estar en esta final, con un gol les vale, siempre y cuando los portugueses no anoten en San Mamés.
Para lograr la gesta de disputar una final europea 35 años después, deberá mejorar mucho el juego que desplegó hace una semana en tierras portuguesas, donde fue superado en muchas partes del encuentro por su rival, que supo aprovechar los huecos que dejó el club bilbaíno en defensa para remontar el resultado. Para ello el estadio debe empujar, y seguro que los aficionados que vayan al estadio llevarán a su equipo en volandas para que este se clasifique para la final.
Bielsa tiene para el encuentro dos noticias, una buena y otra mala. La buena es que recupera a Javi Martínez para el eje de la defensa, lo que de proporcionará una mejor salida del balón. La mala es la baja por sanción de De Marcos, cuyo puesto está previsto que sea ocupado por Ibai Gómez. La otra duda que tenía Bielsa era el estado físico de Muniaín, pero este podrá jugar sin problemas.
El entrenador del club lisboeta viene avisando toda la semana que no saldrán a encerrarse y que buscarán un gol que les de tranquilidad. Para lograr esto su entrenador, Sá Pinto, recupera a Matías Fernández, pero pierde por sanción a Izmailov, puesto que puede ser ocupado por Martins o Jeffren.
Los jugadores bilbaínos tendrán que tener mucho cuidado con el español Capel, que ya se la lio en el partido de ida, ya que atraviesa un gran estado de forma.
El partido será dirigido por el colegiado Martin Atkinson.