duelo de lágrimas

El Real Madrid ha sido eliminado de la Champions por el Bayern de Múnich justo 24 horas después de que Benítez y su Liverpool privaran, a la española, claro, al Barça de colarse en los cuartos dejando al Valencia como único representante español en la Liga de Campeones.

Que el Barça ha sido eliminado pues es noticia, porque aunque el Liverpool, a mi parecer, ha sido justo vencedor de la eliminatoria, los blaugranas no dejaban de ser los actuales campeones y de hecho consiguieron ganar en Anfield donde casi nadie lo consigue hoy día.
Pero por mucho campeón que sea, creo que Rijkaard, en esta ocasión ha topado con hueso y no ha sido capaz de plantarle cara a nuestro Benítez que, no sé, pero algo tendrá que todos los equipos le funcionan a la perfección dando una sensación de bloque sólido impresionante. Y si después escucho la radio donde dice que el mérito es de sus jugadores y cosas así, denota que al menos humildad no le falta, cosa que a otros parece ser  que sí.

Ahora, que el Real Madrid haya sido eliminado, pues sinceramente no es noticia si analizamos la trayectoria tan irregular que lleva este año con un Capello que huele a podrido ya desde hace tiempo. Y digo esto porque el técnico italiano ha tirado por la borda el partido con un planteamiento nefasto acabando con la ilusión de los miles de aficionados que han ido hasta Alemania y los que lo han seguido por televisión. Solo me queda ya escuchar a Mijatovic decir una vez más que el Real Madrid se siente perjudicado por los árbitros. Ahora resulta que Capello también es árbitro y no lo sabíamos nadie. Calderón también está apuntado al curso de árbitro, pero ese ni siquiera lo aprueba. ¡Qué barbaridad!, pobre Casillas. En fin, no me queda más que darle la enhorabuena al vencedor de la eliminatoria que al final ha sido el menos malo.

Y del Valencia qué ¿decir?. Pues simplemente que enhorabuena a todos menos a uno. Bueno a dos. El primero no merece ni nombrarlo porque lo que hizo no tiene nombre y espero que sea sancionado correpondientemente. Y el segundo es un aficionado. Digo esto porque lo que viví en Mestalla merece este comentario. Pues resulta que ya avanzada la segunda parte y cuando el Inter estaba acosando a Cañizares, en una jugada polémica cercana a uno de los córners un aficionado soltó una botella, que supongo que iría con intención de darle al linier. Bien pues la reacción de toda la gente fue volverse hacia el autor del lanzamiento pitándole y pidiendo que se lo llevaran. Al final la policía tuvo que llevarse al aficionado valencianista. Eso está bien, que la gente tomemos conciencia y que no demos espectáculos bochornosos como el de Sevilla. 
Pero claro, los aficionados no podemos hacer nada cuando los jugadores se lian a puñetazos por culpa de un energúmeno poniéndonos a los españoles en vergüenza ante los ojos de todo el mundo.

Total que el sábado juegan los dos recién eliminados de la Champions. Esperemos que Barça y Real Madrid hayan secado sus lágrimas y nos hagan disfrutar como todos los que gustamos de buen fútbol esperamos.