LHH, la destacada empresa en soluciones integrales de talento del Grupo Adecco, ha presentado recientemente los resultados de su estudio ICEO (International Center for Executive Options), que busca ofrecer una visión completa del estado del liderazgo ejecutivo para el año 2025. Para llevar a cabo esta investigación, se encuestó a 2.675 ejecutivos de alto nivel, incluidos 251 líderes españoles, abarcando un amplio espectro de industrias y regiones, con el propósito de proporcionar a las empresas herramientas útiles para enfrentar los desafíos futuros.
El informe revela que los líderes españoles están principalmente preocupados por tres factores: los problemas en la cadena de suministro (29,08%), la globalización y el aumento de la competencia (27,89%) y la complejidad del cumplimiento regulatorio (27,49%). Estos temas destacan la presión a la que se ven sometidos los directivos, quienes deben equilibrar la necesidad de crecimiento con un entorno de mercado cada vez más dinámico y competitivo.
La investigación también subraya que los líderes se enfrentan a múltiples y complejos desafíos. Además de aquellos previamente mencionados, los problemas económicos y de mercado están en la lista de preocupaciones de los directivos españoles, donde un 26,95% señala la globalización y un 26,84% menciona las presiones inflacionarias y el incremento de costes. Esto destaca la urgencia de desarrollar estrategias de liderazgo ágiles y resilientes, que incluyan medidas concretas como la diversificación de proveedores y la implementación de prácticas de trabajo flexibles.
En cuanto a la confianza en su liderazgo, el estudio halló que una gran parte de los líderes españoles se siente capacitada para enfrentar los desafíos actuales. Un 31,87% otorgó un 8 en una escala del 1 al 10 a su confianza en sí mismos, y un 35,06% hizo lo mismo respecto a la confianza en sus equipos. Sin embargo, a nivel global, muchos líderes expresan inseguridades sobre sus capacidades y las de sus equipos, lo que pone de relieve la necesidad de un acompañamiento y desarrollo adecuados.
Además, la investigación reveló que a pesar de que el 65% de los líderes españoles siente apoyo de sus organizaciones, un 57% también solicita más respaldo para manejar los desafíos de su rol. Esto enfatiza la importancia de dotar a los líderes de las herramientas y recursos necesarios para adaptarse a un entorno empresarial en constante evolución.
Entre los obstáculos que limitan la efectividad de los equipos de liderazgo en España, sobresalen la falta de cohesión entre los miembros del equipo directivo (26,69%) y la implementación deficiente de iniciativas de gestión del cambio (26,69%). Estos problemas exigen un enfoque en mejorar la alineación estratégica y eficientizar los procesos de toma de decisiones.
La fidelización del talento directivo se mantiene como una prioridad esencial. Un 31,87% de los líderes españoles indicó que más de la mitad de su equipo cambió en el último año, aunque España presenta una rotación de altos directivos inferior a la media global. Para enfrentar esta cuestión, es crucial establecer planes de sucesión claros y efectivos. El 62,95% de los líderes en España asegura que su empresa cuenta con un plan de sucesión documentado, mientras que a nivel mundial, este es un desafío que enfrentan uno de cada cuatro ejecutivos.
La salud y el bienestar de los líderes también emergen como temas fundamentales, ya que el 47,01% siente una sobrecarga de trabajo. A pesar de que el 68,13% considera que su trayectoria profesional en la organización es clara, un 64,94% reconoce necesitar mayor apoyo. Estas percepciones revelan la necesidad de crear un ambiente de trabajo más equilibrado y sostenible para los líderes.
LHH ha puesto en marcha el servicio ICEO, ofreciendo un acompañamiento integral y personalizado a altos ejecutivos, que incluye la asesoría de un Peer-Advisor y un grupo de International Advisors. Esta iniciativa busca facilitar la integración y desarrollo de líderes, garantizando una adaptación exitosa a sus nuevos roles y apoyando la continuidad de la gestión a través de un efectivo acompañamiento en procesos de sucesión y desvinculación.
