Un regalo para la afición y para los forofos del fútbol. Eso fue anoche el partido en el que el Atlético de Madrid arroyó al Schalke 04 en el Vicente Calderón y en el que certificó su pase a la Champions League.
12 años después el equipo del manzanares ha vuelto a la competición internacional, y de qué manera, con cuatro goles que hicieron rugir al todos los colchoneros allí presentes. Ya estaba bien de sufrimiento. ¿Recuerdan aquella campaña publicitaria del club en la que una hijo preguntaba a su padre por qué eran del Atletico? Este partido es la respuesta.
Javier Aguirre planteó un partido claro, mucho toque y tranquilidad, algo que no suele suceder en el equipo rojiblanco. El nerviosismo ante un partido de este calibre debía desaparecer y dar paso al buen fútbol, calmado y sosegado, llevando el control del encuentro en todo momento. El guión se cumplió a la perfección y a él contribuyeron todos los actores del equipo, pero alguno en especial. Maniche devolvió el gesto de confianza de Aguirre haciendo un partido magistral desde el centro del campo y el Kun Agüero volvió de la selección albiceleste para hacer un recital de calidad y buen fútbol.
El Schalke estaba cerrado en su portería mostrando una barrera defensiva que, intentaban, fuera difícil derribar, pero para el Atlético de ayer eso no era un obstáculo. El que lo consiguió fue Perea que realizó un magnifico pase para que el Kun rematara de cabeza e inaugurara el marcador. En ese momento la eliminatoria quedaba igualada (1-1) teniendo en cuenta el partido de ida.
Forlán se encargó de aumentar la diferencia con un segundo gol, a pase de Agüero, que desató la euforia en la grada. Con ese resultado el Atlético estaba en Champions, pero todavía quedaría más. En el minuto 63, el conjunto teutón dio señales de vida en el ataque y tanto Fabian Ernst como Kevin Kuranyi no acertaron a rematar un centro de Heiko Westermann. Seguidamente, de nuevo gozó de otra ocasión el Schalke, pero Westermann vio como Leo franco le detuvo el remate.
Casi llegando al final del encuentro el Kun volvió a intentarlo con un disparo a puerta que repelió Schober, cayéndole de nuevo al argentino que centró para que Luis García hiciese el tercero. El cuarto llegó con un penalti que Pander realizó sobre Simao (que provocó la expulsión del jugador alemán) y que transformó Maxi Rodriguez.
4-1 en el marcador final de la elimatoria. 4-1 que no olvidará ningún aficionado del Atlético de Madrid, porque ayer día 27 de Agosto de 2008 su equipo volvió a la Champions League y los colores de su camiseta se pasearán por todo Europa.
