Mucha gente podía pensar que lo que hizo David Beckham fue una locura, puesto que que tenía nivel para estar en un grande de Europa, pero él prefirió el glamour de Los Ángeles antes de la fama, quizás empujado por su señora y los niños, ya que la primera se podía ir de compras y estar en entre la «creme» de la ciudad newyorkina.
Aunque el fichaje pueda ser muy bueno para el Milan, puesto que juntaría en el campo a Kaka, Shevchenko, Ronaldinho, quizás Ronaldo, Maldini y Beckham, además de que el inglés no cobraría ni un solo euro por los seis meses que estaría jugando en Italia, creo que sería meter más de lo mismo a un club que necesita savía nueva, necesita un cambio y eso no se consigue con viejas glorias, sino con jugadores como Pato, gente joven y con ganas de ganar cosas.