Esta semana, la empresa de pruebas genéticas 23andMe se declaró en bancarrota, lo que implica que los datos genéticos que ha recopilado de millones de usuarios están ahora a la venta. Para aquellos que no deseen que su información sea incluida en una posible transacción, es recomendable solicitar a la compañía que elimine sus datos a la mayor brevedad posible.
Cuando la empresa anunció por primera vez que estaba considerando la venta de sus datos, se mencionaron diversos problemas potenciales, incluidos los riesgos de que esta información caiga en manos de empresas con prácticas de seguridad deficientes o que tengan vínculos directos con las fuerzas del orden. Con la declaración de bancarrota, las preocupaciones expresadas en su momento siguen vigentes. La incertidumbre sobre el destino de los datos genéticos de los usuarios en caso de que 23andMe encuentre un comprador destaca la importancia de considerar la eliminación de esta información. Esta opinión también ha sido respaldada por el fiscal general de California, Rob Bonta.
Para aquellos que quieran proteger su información, el primer paso es descargar sus datos antes de proceder a la eliminación de su cuenta. Para hacerlo, los usuarios deben iniciar sesión en su cuenta de 23andMe, acceder a la sección de «Configuración» y luego dirigirse a «Datos de 23andMe» donde podrán visualizar y descargar diferentes partes de su información, como resúmenes de salud, composición de ascendencia y datos familiares.
Una vez que el usuario haya descargado lo que considera necesario, el siguiente paso es eliminar sus datos de manera permanente. Este proceso implica navegar nuevamente a la sección de «Configuración» y hacer clic en «Eliminar Datos de Forma Permanente». Posteriormente, recibirán un correo electrónico que deberán confirmar para completar la eliminación.
23andMe debería ofrecer a cada usuario la posibilidad real de oponerse a la transferencia de datos en esta bancarrota y asegurarse de que cualquier comprador cumpla con compromisos sólidos en materia de privacidad. Además, otras empresas del ámbito de la genealogía genética deberían adoptar medidas proactivas para proteger la información de sus clientes.
La situación actual subraya por qué es crucial implementar salvaguardias en el manejo de nuestros datos genéticos, que son un reflejo íntimo de nuestra identidad y pueden revelar información sobre nuestra salud y antecedentes familiares. Esta experiencia pone de manifiesto cómo determinadas funciones que inicialmente pueden parecer inofensivas pueden ser utilizadas de maneras imprevistas y peligrosas. La bancarrota de una empresa no debería significar que nuestros datos se transfieran al mejor postor sin nuestra autorización ni garantías de protección efectiva.
Fuente: EFF.org