Boca consiguió en el estadio de Racing de Avellaneda levantar un nuevo Torneo Apertura, y es que el conjunto entrenado por Ischia, que tuvo el honor de tener una alegría que pocos habían sentido antes, porque no solo se alzó con el título, sino que también ha visto como su eterno rival, River Plate ha quedado último en la clasificación.
El estadio tuvo un ambiente impresionante, las dos hinchadas animaron hasta el final del encuentro, y por desgracia para Tigre fue una victoria insuficiente, ya que a pesar deganar el encuentro por la mínima, los goles a favor decantaron el título para los xeneizes, que sufrieron y mucho al final del encuentro con los balones colgados al área, además también tuvieron la ausencia de Román Riquelme, que no pudo participar en el partido más importante y que estuvo en el palco junto a Martín Palermo o el mismísimo Maradona, que no se quiso perder el encuentro.
Boca dominó durante todo el encuentro, fue mejor y tuvo más rato el balón, pero sus delantero no pudieron batir a Luis Ardente, entre ellos estaba Luciano «Lucho» Figueroa, que tuvo varias oportunidades, pero no estuvo acertado, quien tuvo el honor de anotar el único gol del partido fue Lázzaro, y es que el delantero de Tigre aprovechó a la perfección la indecisión de Javi García, porque el portero que jugó el partido lesionado no salió a tiempo a por un balón largo y vio como entraba el esférico.
Hubieron dos noticas tristes, por un lado la lesión del guardameta de Boca, que fue sustituido por Josué Ayala, y después estuvo la expulsión de Rodrigo Palacio, que pagó caro sus nervios y vio la tarjeta roja, aunque ambas se quedaron en anécdota porque se consiguió ser campeón del Torneo Apertura.
Fuente: universalfutbol