Pues sí, mi iniciación a los juegos de ROL fue temprana. Me he percatado de ello al reordenar viejas cajas en el garaje. En medio del polvo he redescubierto algunos juegos de mesa bien conservados, de finales de los ochenta, que amenizaron las tardes que mi hermano y yo pasábamos en casa durante los días lluviosos de invierno – y también algún que otro día soleado de verano.
Uno de ellos es el entrañable Talisman, de Games Workshop: una segunda edición con su tablero puzzle, cartas, cuatro bases para jugadores y un dado. ¡Qué recuerdos! Al principio no nos aclarábamos con la reglas – más que nada por la impaciencia de querer jugar rápidamente. El juego venía con un manual traducido en italiano, ya que todo lo demás (cartas, tablero, etcétera) estaba en versión original inglesa. Una maravilla que ya no está en venta desde hace once años, y que se puede adquirir en eBay por unos cien dólares. Me recuerda mucho a los videojuegos roguelike.