Aumento del Subsidio por Desempleo entre Personas Mayores de 50 Años: Un Crecimiento del 3,4% Desde 2024 y del 9% Desde 2020 según la Fundación Adecco

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Crece el número de personas mayores de 50 años que cobran subsidio por desempleo, un 3,4% más que en 2024 y un 9% más que en 2020, según un estudio de la Fundación Adecco

Más de medio millón de personas mayores de 50 años reciben subsidio por desempleo en España, según el último informe del Observatorio de la Vulnerabilidad y el Empleo de la Fundación Adecco. En abril de 2025, un total de 545,143 adultos de esta franja etaria percibieron dicha ayuda, marcando la cifra más alta registrada en un mes de abril desde que existen estadísticas oficiales. Este dato pone de manifiesto las dificultades que enfrentan los profesionales sénior para reincorporarse al mercado laboral.

La Fundación Adecco ha presentado su 17º informe, titulado #TuEdadEsUnTesoro, en el que se analizan las estadísticas del Ministerio de Trabajo y Economía Social junto con encuestas realizadas a 450 profesionales mayores de 50 años que están en busca activa de empleo. De estos, el 75% se encuentra en desempleo de larga duración, lo que significa que han estado sin trabajo por más de un año.

El estudio resalta la discrepancia entre el creciente envejecimiento de la población y la dificultad de las personas mayores para acceder a nuevas oportunidades laborales. A pesar de que el talento sénior es esencial para la competitividad empresarial y el crecimiento económico, el aumento en el número de subsidios por desempleo plantea el riesgo de que esta situación se convierta en un camino precario hacia la jubilación.

Un aspecto menos explorado en estudios previos, que este informe aborda, es el impacto emocional del desempleo prolongado en la identidad y el sentido de propósito de las personas mayores. Según Begoña Bravo, directora de Inclusión de la Fundación Adecco, el desempleo a largo plazo puede erosionar la autoestima y generar sentimientos de inutilidad y aislamiento entre quienes aún tienen mucho que aportar.

Los subsidios por desempleo son una forma de asistencia económica destinada a aquellos que han agotado sus prestaciones, pero su presencia creciente sugiere que muchos optan por ellos como una solución a largo plazo debido a la falta de opciones genuinas en el mercado laboral. Francisco Mesonero, director general de la Fundación, advierte que este subsidio, aunque necesario, puede convertirse en un incentivo negativo para buscar nuevas oportunidades de empleo.

Las comunidades autónomas muestran disparidades significativas en la recepción de estos subsidios. Andalucía, Comunidad Valenciana y Cataluña concentran la mayor parte de los beneficiarios, mientras que Murcia y Navarra han visto crecer los subsidios para mayores de 50 años más rápidamente en el último año. En contraste, en regiones como el País Vasco y la Rioja, una alta proporción de los perceptores de subsidio muestran el impacto de la reestructuración en sectores como el automotriz y el metal.

Más preocupante aún es la tendencia hacia la economía sumergida, ya que un 55,2% de los encuestados considera esta opción ante la necesidad de ingresos. Sin embargo, Mesonero subraya que este enfoque no es sostenible a largo plazo y es crucial fomentar el retorno al mercado laboral formal para garantizar una jubilación digna.

Entre las personas mayores de 50 años que están sin trabajo, el 54,6% confesó haber estado desempleada por más de un año, lo que resalta el riesgo de pobreza y exclusión social dentro de este grupo. Además, el estigma asociado a la edad y las dificultades para adaptarse a nuevas tecnologías complican aún más su situación.

A medida que el desempleo prolongado afecta no solo la situación económica, sino también la salud mental de estas personas, el tablero completo del mercado laboral requiere una atención renovada. Es esencial implementar políticas activas de empleo que no solo ofrezcan apoyo sino que también integren a los trabajadores mayores en un entorno laboral cambiante que necesita su valiosa contribución.