Cadel Evans ha sido el gran triunfador del Tour de Francia 2011, pero como siempre que hay un ganador, tiene que haber una decepción, aunque en este caso es un perdedor y por partida doble.
Los ciclistas de Luxemburgo eran los máximos favoritos para ganar este tour de Francia, pero después no lo han demostrado en carrera, porque su obsesión con Alberto Contador no les ha permitido ver las etapas con objetividad, entre otras cosas han pensado que era el gran rival y, a pesar, que lo descartaron en varias declaraciones, pero nunca en carrera.
En la última etapa los hermanos no pensaron en atacar a Cadel Evans, y si en defender las diferencias en la clasificación con Alberto Contador, y es que le faltó mucha sangre fría en momentos clave de la carrera, permitiendo que el australiano de BMC se aprovechara de la situación.