El Neutrino® Energy Group ha presentado una innovación que podría transformar el panorama energético en América Latina y el mundo. Se trata de la neutrinovoltaica, una tecnología que convierte la radiación invisible en electricidad continua, basada en una fórmula que combina décadas de investigación. Esta fórmula permite extraer energía de los neutrinos, los muones cósmicos y otros fenómenos naturales, utilizando capas de grafeno y silicio para generar un movimiento de electrones que es cálido, verificable y escalable.
El Neutrino Power Cube, un generador que pesa alrededor de 50 kilogramos, es capaz de producir entre 5 y 6 kW de potencia constante, asegurando un suministro eléctrico que opera sin depender de combustibles o grandes infraestructuras. Este avance es significativo, ya que la instalación de 200,000 de estos cubos podría reemplazar la carga base de una central nuclear, brindando una opción de energía confiable a comunidades remotas en los Andes, el Amazonas y las islas del Caribe.
La robustez de esta tecnología se refleja en su diseño, capaz de operar en condiciones climáticas extremas que van desde temperaturas de -40 hasta +60 °C, gracias a un sistema de regulación térmica que mantiene el núcleo en un rango óptimo. Esto asegura que el rendimiento se mantenga estable, independientemente de las condiciones externas.
Holger Thorsten Schubart, director ejecutivo de la empresa, destaca que este logro no es solo el triunfo de una compañía, sino un esfuerzo colectivo de instituciones científicas de todo el mundo. Considera que América Latina se encuentra en un punto de inflexión, donde se podrá acceder a electricidad limpia y descentralizada, eliminando así la dependencia de importaciones de combustible y redes eléctricas centralizadas.
A pesar del avance en energías renovables como la solar y eólica en la región, la intermitencia y la distribución desigual aún son problemas. La neutrinovoltaica, sin embargo, proporciona un suministro energético constante durante todo el año, apoyándose en la radiación invisible que está presente sin interrupciones. La fórmula maestra que sustenta esta tecnología simboliza la equidad energética, permitiendo que todas las comunidades, sin importar su ubicación, compartan un suministro eléctrico confiable.
Se espera que la neutrinovoltaica siga un camino similar al de la energía fotovoltaica, con una progresiva expansión que comenzará a hacerse realidad en la próxima década, donde se llevarán a cabo proyectos piloto y la producción en masa estará al alcance. Este avance podría marcar el inicio de una nueva era en la que la proximidad energética sustituya a la dependencia y la equidad a la escasez, ofreciendo a América Latina la oportunidad de acceder a una electricidad estable, asequible y universal.