Casi cuatro años después de la toma del poder por parte de los talibanes en agosto de 2021, un nuevo informe de ONU Mujeres pone de manifiesto la alarmante situación de las mujeres afganas, que se encuentran muy por debajo de los estándares globales en cuanto al desarrollo humano. El Índice de Género de Afganistán, la evaluación más completa de la capacitación de la mujer y la igualdad de género desde la llegada de los talibanes, revela que cerca de ocho de cada diez jóvenes afganas están excluidas de la educación, el empleo y la formación, una cifra casi cuatro veces mayor que la de sus homólogos masculinos.
Las restricciones impuestas a las niñas y mujeres en la educación secundaria y terciaria, que incluyen la formación médica, hacen prever que muy pronto ninguna niña podrá completar su educación secundaria. «No podemos aceptar este peligroso precedente. Las mujeres y niñas afganas no se han rendido y no nos rendiremos con ellas», manifestó Sofia Calltorp, responsable de Acción Humanitaria de ONU Mujeres, en una rueda de prensa en Ginebra.
El informe también destaca que Afganistán presenta una de las mayores brechas de género del mundo en términos de participación en el mercado laboral, con solo el 24% de las mujeres en la población activa, en comparación con el 89% de los hombres. Desde que los talibanes tomaron el poder, el número de mujeres desempleadas en búsqueda activa de trabajo se ha cuadruplicado, mientras que el número de mujeres empleadas se ha duplicado. «El mayor recurso de Afganistán son sus mujeres y niñas. Su potencial sigue sin explotarse, pero perseveran. Las mujeres afganas se están uniendo, dirigiendo empresas, proporcionando ayuda humanitaria y enfrentándose a la injusticia», añadió Sima Bahous, directora ejecutiva de ONU Mujeres.
Las disparidades son alarmantes. Las mujeres en Afganistán tienen más probabilidades de trabajar desde casa y ocupaciones mal remuneradas y precarias. Además, asumen la mayor parte de las tareas domésticas no remuneradas, con un 74% de las mujeres dedicando una cantidad considerable de tiempo a estas tareas, frente al 3% de los hombres. En términos generales, el informe indica que Afganistán tiene la segunda brecha de género más alta del mundo, con una diferencia del 76% entre hombres y mujeres en los ámbitos de salud, educación, inclusión financiera y toma de decisiones.
El índice revela que, en promedio, las mujeres sólo alcanzan el 17% de su potencial en cuanto a capacidad de elección y acceso a oportunidades, mientras que, a nivel mundial, las mujeres superan el 60% en estos aspectos. La situación en Afganistán pone de relieve la urgente necesidad de abordar estas desigualdades y garantizar los derechos y el bienestar de todas las mujeres en el país.
Fuente: ONU últimas noticias