Quizás en una temporada de transición donde el equipo rossonero está jugando la UEFA en vez de la Champions, Berlusconi está buscando ingresos por otro lado, porque después del fichaje mediático de Ronaldinho, aunque hay que decir que le está dando resultados, sin alcanzar el mejor nivel del brasileño, se le ha unido el de David Beckham, que solo estará en Milan unos seis meses, hasta que vuelva a comenzar la liga de Estados Unidos, donde juega con los Angeles Galaxy.
Así que David Beckham podrá o no hacer muchas cosas dentro del campo, lo que está claro que fuera de él, en las arcas del club va a servir para mucho, de hecho su camiseta es la más vendida por delante de Kaká, y es que el glamour del inglés hace que la afición se vuelque más a adquirir la camiseta milanista.