Septiembre trae consigo no solo el regreso a las aulas para miles de estudiantes, sino también un nuevo ciclo para la industria publicitaria. La «vuelta al cole» se consolida como un momento clave para las marcas que buscan reactivar sus estrategias de comunicación y marketing. Con un gasto medio de 492 euros por persona en España, tal como indica un estudio reciente, este mes se presenta como una oportunidad inmejorable para captar la atención de un público objetivo que está en búsqueda activa de ofertas y productos.
A medida que la publicidad digital se adentra en el último cuatrimestre del año, se identifican tres tendencias destacadas que moldearán el panorama publicitario. En primer lugar, la inteligencia artificial se ha transformado en una herramienta esencial para la personalización. La implementación de soluciones que aplican segmentación contextual mediante IA permite a las marcas adaptar sus mensajes a cada contexto y momento de consumo. El resultado son anuncios que resultan más relevantes, aumentando los niveles de interacción y estableciendo una conexión más orgánica con el contenido consumido por los usuarios.
En segundo lugar, la atención cualificada se alza como un factor crucial en el marketing actual. Las marcas están cambiando su enfoque, priorizando la calidad sobre la cantidad de impresiones. Se está dejando atrás el viejo paradigma de cuántos anuncios se ven, centrándose en cómo estos se perciben. Asegurar que los impactos sean visibles en pantalla completa y en contextos seguros se ha convertido en un estándar que mejora el recuerdo de marca y fomenta la transparencia entre consumidores, medios y anunciantes.
Finalmente, la optimización de la inversión y la orientación hacia el impacto real son tendencias que marcan el paso en un entorno donde los presupuestos son ajustados. Las marcas están priorizando estrategias que maximicen el rendimiento de cada euro invertido, auditar la calidad de cada impresión y destinar recursos solo a aquellos impactos que aporten valor tangible en la decisión de compra. La inteligencia artificial se presenta como un aliado estratégico, incrementando la eficiencia en la creación de contenidos entre tres y diez veces, sin sacrificar la calidad creativa.
Plácido Balmaseda, Country Manager Iberia de EXTE, subraya que este nuevo ciclo ofrece una oportunidad perfecta para que las marcas se enfoquen en estrategias más responsables, relevantes y medibles. La clave radica en combinar tecnología y creatividad para captar y retener la atención de un consumidor que se torna cada vez más exigente con los contenidos que consume. La publicidad ya no puede limitarse a ser un simple mensaje en pantalla, sino que debe ofrecer valor, integrarse coherentemente en el entorno y generar confianza. Las marcas que comprendan este cambio tendrán la posibilidad de destacarse en un mercado en constante evolución, donde la innovación se convierte en el motor de la inversión.
De esta manera, la vuelta al cole publicitaria se perfila como un periodo en el que las campañas serán más personalizadas, las experiencias digitales más inmersivas, y el uso de los canales será estratégico. En este entorno, la innovación será el factor determinante que marque la diferencia.