¡Vaya año nos espera!

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Capello Esta fue la frase más repetida seguramente en la tarde ayer en el Estadio Santiago Bernabéu en el que fue el debut liguero del conjunto merengue en liga contra el Villareal. El Madrid ya no es ese equipo anárquico, poco peleón y mal trabajado físicamente que nos tenía acostumbrados las pasadas temporadas. No. Ahora hemos pasado al otro extremo. Un equipo bien ordenado atrás, que intenta presionar arriba al rival y con un centro del campo de fuerza con 2 grandes recuperadores, pero falto de una cualidad indispensable para jugar al fútbol y que si tenía el Madrid de los «Galáctico»: Talento. Sinceramente no creo que este fútbol guste mucho a los madridistas, que por cierto ya han abucheado al equipo (y a Capello consecuentemente) en los dos partidos disputados en el Bernabéu. Muy mal comienzo para un proyecto con el que se espera destronar a un Barcelona que hasta la pasada final de la Supercopa de Europa parecía invencible.

Me gustaría comentar la figura del flamante técnico madridista, Fabio Capello. Cuando Ramón Calderón anunció que el técnico italiano sería el encargado de entrenar al equipo en el caso de ser él elegido presidente, fueron muchos los que alabaron la decisión, argumentando que lo que el Madrid necesitaba era mano dura y hacer una verdadera “limpia” en el vestuario, cosa que no ha ocurrido ya que hasta ahora los que han salido del club han sido sólo canteranos. Pero se olvidaron del fútbol que practican los equipos “made in Capello”. Hace 10 años, en su anterior etapa como técnico del Madrid, Capello logró ganar la liga ni más ni menos que ante el FC Barcelona liderado por la mejor versión de Ronaldo jamás vista en un terreno de juego. Tras ganar la liga, Capello abandonó al Madrid. Cosa que también ha hecho con sus dos últimos equipos, Roma y Juventus. Después de multitud de rumores que lo colocaban de nuevo en la entidad blanca en estos últimos años fue Mijatovic, ex-jugador suyo, quien lo convenció para que volviera a Madrid. Cuando se ficha a Capello sabes a lo que te atienes, y si no, no se le ficha. Por mucho que ahora se le recrimine a Calderón que no ha traído a las demás promesas electorales (Kaká, Cesc y Robben) se sabía de antemano que este tipo de jugadores no son muy del agrado del Capello y que este tendría otras prioridades. Y Calderón, para no cometer el mismo error que Florentino Pérez, hizo caso a su entrenador y a su director general deportivo haciendo los fichajes que el técnico italiano consideró imprescindibles para su proyecto. Por eso me parecen injustas las críticas a Ramón Calderón por no traer a jugadores de más talento. Esos mismos aficionados que el domingo abuchearon al equipo son los mismos que pitaban a jugadores de la calidad de Ronaldo o Guti, y que aplaudían las carreras “tribuneras” y muchas veces innecesarias de Gravesen.

Capello ha pedido tiempo y hay que dárselo, ya que sus equipos no enamoran por su juego pero si en algo destacan es que son muy efectivos y ganadores. A algunos no nos gusta este fútbol, pero eso habría que haberlo pensado a la hora de votar al candidato correcto y no votar cegados por promesas electorales.