General Atomics ha anunciado un ambicioso plan para acelerar el desarrollo de cazas no tripulados en un esfuerzo por fortalecer la capacidad militar de Europa. La compañía, conocida por su expertise en sistemas aéreos no tripulados, está avanzando hacia la entrega de una nueva Aeronave de Combate Colaborativo (CCA). Este nuevo modelo europeo estará basado en una plataforma estadounidense ya probada, que será ensamblada en Europa y equipada con sistemas de misión desarrollados por empresas europeas.
El caza se deriva del prototipo YFQ-42A de las Fuerzas Aéreas de EE.UU., que actualmente se encuentra en fase de pruebas terrestres y cuyo primer vuelo está programado para finales de este verano. General Atomics Aeronautical Systems, Inc. (GA-ASI), con sede en San Diego, California, es la encargada de diseñar y construir la aeronave, mientras que la filial alemana, General Atomics Aerotec Systems GmbH (GA-ATS), se responsabilizará de la personalización del sistema de misión y de la fabricación en Europa.
Este enfoque colaborativo busca no solo aprovechar las inversiones y la experiencia acumulada en ambos lados del Atlántico, sino también facilitar el cumplimiento de los plazos de adquisición que las naciones europeas han establecido para modernizar sus flotas. Además, se contempla la creación de un marco para futuras colaboraciones a nivel internacional en defensa y tecnología.
Linden Blue, CEO de GA-ASI, destacó la importancia de combinar la experiencia en aeronaves no tripuladas con la de sistemas de armas y sensores europeos. «Estamos impacientes por comenzar esta colaboración que nos permitirá entregar en grandes cantidades una aeronave de diseño probado, incorporando tecnología de alta calidad de Europa», declaró Blue.
General Atomics ha demostrado ser un líder en la industria aeroespacial, con más de 1.200 aeronaves entregadas a lo largo de 30 años y una flota que acumula cerca de 9 millones de horas de vuelo. La compañía ha sido pionera en varios tipos de aeronaves no tripuladas y el YFQ-42A representa un avance significativo, desarrollándose en un tiempo récord a partir del modelo XQ-67A.
Las ofertas de colaboración internacional son un pilar fundamental para General Atomics, con aeronaves de la compañía operando ya en una variedad de países, incluidos Estados Unidos, Reino Unido, España, Francia, Italia y Japón. La empresa mantiene una sólida cadena de suministro en estas naciones, donde se fabrican componentes críticos y sistemas de sensores.
GA-ATS, establecida en Alemania, cuenta con más de 40 años de experiencia en fabricación y mantenimiento de aeronaves. Entre sus proyectos actuales se encuentra el mantenimiento de helicopteros NH-90 y las revisiones de motores para aviones no tripulados.
La nueva Aeronave de Combate Colaborativo está diseñada para integrarse rápidamente en las Fuerzas Aéreas europeas y de la OTAN, respondiendo a las crecientes necesidades defensivas del continente ante un panorama geopolítico en constante cambio. Blue afirmó que proporcionar una base de aeronaves completamente desarrolladas representa una oportunidad única para establecer alianzas sólidas con naciones europeas, asegurando la modernización y efectividad de sus fuerzas aéreas.