Timo Glock era el corte, era el quinto piloto en la carrera, es decir, el último puesto que tenía que ocupar Lewis Hamilton sino quería que se le escapara el mundial, y le sacaba unos quince segundos en las dos últimas vueltas, pero los neumáticos hacían que su monoplaza no fuera muy rápido, y que el inglés le recortara la distancias en nada de tiempo, a pesar de eso en la última curva iba por delante, pero sorprendentemente acabó detrás, y la verdad que el adelantamiento dejó una puerta muy abierta, pero según los experto las gomas estaban muy mal y que no podía hacer otra cosa.
Está claro que ahora Timo Glock está seguido por lupa y no se sabrá nunca si fue un error o un fallo adrede, pero está claro que el piloto de Toyota también va a entrar en la historia del primer mundial que ha conseguido el de McLaren, entre otras cosas el debate seguirá abierto por mucho tiempo.