El multipremiado Ron Howard (ganador de dos premios Oscar en la categoría Mejor Director y Mejor Película por “A Beautiful Mind”) apostó una vez más, luego de diez años, a un género que no es su especialidad. Su último comedia, “How the Grinch Stole Christmas”, se estrenó en 2000. Desde entonces, Howard se ha dedicado a cosechar drama y suspenso con historias como “Frost / Nixon”, “Angels & demons”, “The Da Vinci code” y “The Missing”.
La dupla Vince Vaughn y Kevin James representa todo lo (lamentablemente) esperable de una comedia norteamericana de blancos de clase media que, adentrado el siglo XXI, debería más bien avergonzar.
El dilema del soltero Ronny (Vaughn) es si contarle o no a su mejor amigo y socio Nick (James) que ha encontrado a su esposa (Winona Ryder) encamada con un jovenzuelo.
El comportamiento errático de Ronny es aquello que sostiene la película y la convierte en una comedia de enredos ni medianamente graciosa. Los problemas que le ocasiona con su propia pareja (Jennifer Connelly) la duda hamletiana que lo guía, lo obligan a decidir entre romper el corazón de su amigo y poner en peligro el negocio conjunto o perder una entrañable amistad para siempre.
Les ahorro el dilema: no la vean.
