En 2024, los accidentes de aviación en la Unión Europea (UE) que involucraron aeronaves registradas en la región resultaron en la trágica pérdida de 91 vidas. Este número representa una notable disminución de 30 muertes en comparación con 2023, cuando se registraron 121 fallecimientos.
La mayoría de las muertes se produjeron en accidentes ocasionados por aviones, que contabilizaron 74 víctimas. Les siguieron accidentes de planeadores, con 10 muertes; helicópteros, con 6; y globos, que causaron una fatalidad. Cabe destacar que durante los últimos dos años no se han observado muertes ni lesiones relacionadas con aeronaves no tripuladas.
Los datos indican que las operaciones no comerciales, incluyendo actividades como el entrenamiento aéreo y demostraciones, fueron las responsables de la abrumadora mayoría de muertes, representando el 91,2% del total. Por su parte, las operaciones especializadas, como aquellas destinadas a la agricultura o la publicidad aérea, aportaron un 5,5%, mientras que el transporte aéreo comercial supuso solo un 3,3% de los fallecimientos.
Estos hallazgos son fruto de la información publicada hoy por Eurostat, que detalla la seguridad aérea en la UE. Además, se revela que en el último año, 214 personas resultaron heridas, entre graves y leves, en incidentes relacionados con aeronaves registradas en la UE, lo que supone una disminución respecto a los 229 casos del año anterior. Aproximadamente el 60% de las lesiones se vinculan a accidentes de aviones, con 129 heridos. Accidentes de planeadores causaron 41 lesiones, mientras que helicópteros y globos sumaron 24 y 20, respectivamente.
La tendencia de reducción en los incidentes aéreos se refleja en diversas estadísticas, lo que sugiere un enfoque en la mejora de la seguridad en el transporte aéreo dentro de la región.