El Alto Comisionado de la Oficina de Coordinación de la Ayuda Humanitaria (OCHA) ha hecho un llamado a los responsables políticos que han aprobado recortes en la ayuda humanitaria para visitar Afganistán y comprender el impacto real de estas decisiones en la población afectada. Durante su reciente visita al país, Tom Fletcher subrayó que han cerrado 400 clínicas en las últimas semanas, lo que agrava la crisis humanitaria. Estos recortes están generando una división en la respuesta política. Por un lado, algunos políticos se sienten obligados a tomar decisiones difíciles debido a presiones económicas y buscan mantener la importancia de la ayuda humanitaria. Por otro lado, hay quienes celebran esos recortes, lo que ha llevado a Fletcher a afirmar que le gustaría llevar a esos políticos a encontrarse con familias que sufren por las decisiones tomadas.
Fletcher también enfatizó que el aislamiento no es la solución. “Si quieres hacer grande a tu país, entonces no te retiras del mundo”, declaró. Advirtió que futuros problemas, como pandemias y crisis económicas, no se podrán evitar con medidas de bloqueo. Resaltó que la reducción en la ayuda podría comprometer hasta un tercio del sector, lo que tendría consecuencias devastadoras.
El Alto Comisionado destacó que el dinero recortado no regresará pronto y posiblemente se avecinen más recortes. Esto hace aún más urgente buscar nuevos socios y fomentar un cambio de discurso en torno a la solidaridad, incluyendo al sector privado en la solución. OCHA enfrenta lo que ha denominado un «reajuste humanitario», buscando minimizar el daño mientras se reestructura la ayuda.
Pese a la crisis de financiación, Fletcher mencionó que algunos donantes se mantienen firmes y que nuevos donantes están surgiendo en regiones como el Golfo y China. Además, OCHA está explorando maneras innovadoras de atraer inversiones del sector privado para asegurar una financiación más diversificada, más allá de los gobiernos.
El diálogo con la administración estadounidense sigue en curso y Fletcher se muestra optimista sobre el compromiso de la Casa Blanca con la protección de la ayuda humanitaria que salva vidas. Desde su incorporación, ha tenido como objetivo reformar el sector humanitario para hacerlo más eficiente y centrado en las necesidades de quienes se beneficia. Al final, reiteró que el propósito fundamental es salvar vidas y que todas las acciones deben ser definidas en base a ese criterio.
Fuente: ONU últimas noticias