De Atenas llega el partido más grande del año: La final de la Champions. Liverpool-Milán. 5 copas contra 6. La ‘vendetta italiana’ sobre la mesa; aún escuece la derrota hace 2 años con remontada incluida. La oportunidad de los milaneses de mostrar su casta el año del Moggigate. La oportunidad de los ‘reds’ de prolongar su leyenda. El talento y clase de Kaká contra la fuerza y la casta de Gerrard. Como para perdérselo.
Una fase de grupos cómoda; encuadrado con PSV, Galatasaray y Girondins. Primero de Grupo y mala suerte en el bombo. Barcelona, actual campeón en Octavos. Benitez, mago preparando eliminatorias con tiempo; vino con la lección aprendida al Camp Nou; donde dejó todo resuelto(1-2). En cuartos de nuevo, PSV, al que barrieron igualmente en la ida (0-3). La eliminatoria fuerte llegó contra el Chelsea; equilibrada totalmente, la nspiración de Reina en los penaltys dió el pase a la finalísima.
En la liguilla algún sobresalto más de lo esperado con Lille, AEK Atenas y Anderlecht para acabar encabezando el grupo. Para octavos, el Celtic de Glasgow. Los escoceses llegaron en el mayor bache de juego de la temporada de los rossoneros. Una genialidad de Kaká marcó la diferencia. En cuartos, Bayern de munich. Los alemanes pusieron las cosas dificiles sacando un 2-2 en la ida; pero en Alemania, el Milán sacó todo su potencial, y dió un golpe de mando. Contra el Manchester United se vió al mejor Milán y a los mejores Kaká y Seedorf. El brasileño con 3 goles (2 en Old Trafford y 1 en San Siro) en la eliminatoria, donde pasaron por encima a los de Ferguson(3-0) en la vuelta haciendo inutil el 3-2 de la ida para los de Manchester.
Dificil hacer pronóstico; más aun tras la anterior final. El Liverpool ha mostrado más solidez; aunque el fútbol practicado por el Milán contra Bayern y Manchester ha sido el mejor de esta edición de la Champions.
