Cuando pensamos en relojes de lujo, nos viene a la cabeza, como si de un mensaje inscrito en nuestra memoria se tratara, la firma Rolex. Su popularidad está fuera de toda duda, pero no es, ni mucho menos la única empresa de relojes de calidad del mercado. Omega, otra firma suiza, siempre ha vivido un poco a la sombra de Rolex, pero sus grandes hallazgos y la calidad de sus relojes la avalan. Hoy os presentamos un reloj Omega de su línea Seamaster, que, como su nombre indica, está especialmente diseñada para su uso en el mar.
Se trata de un reloj, cuyo diseño, llama poderosamente la atención, y está en la línea habitual de la firma suiza. El cristal es de zafiro, convexo, irrayable y con tratamiento antirreflejos en ambas caras. El color del fondo es variable y tenemos desde el clásico elegante de color negro a uno más animado en color azul.
La estanquidad es hasta 300 metros, aunque lo más normal es que no tengas que descender tanto. Cuenta con cronómetro y un sistema de descompresión que permite el uso del reloj en cámaras de presión especiales, lo que favorece su utilización en trabajos submarinos. Todas estas características cuentan con todas las garantías y certificados oficiales. Es decir, que es un reloj para profesionales. Seguro que muchos de vosotros habéis visto alguna vez un reloj marca X que pone aquello de “200 metros Water Resistant” y ante una gota de lluvia ya no volvía a funcionar más. Pues bien, este Omega no es de esa clase.
Algunos de estos Seamaster pertenecen a ediciones limitadas, como por ejemplo la que lleva grabada “007” en su esfera. No, no estáis equivocados, este reloj lo lleva James Bond. Así que si el agente secreto menos secreto del mundo lleva en su muñeca un Seamaster, ¿qué más se puede decir?