Al más puro estilo del Cementerio de los Libros Olvidados de las novelas de Ruiz Zafón, el Gran Hotel Conde Duque de Madrid cuenta con un rincón muy curioso entre sus instalaciones. Una «olvidoteca» en la que reposan los libros que los huéspedes se han dejado olvidados en las habitaciones.
En pleno centro de Madrid, en el Barrio de Chamberí, este hotel cuenta con una biblioteca original, con libros en más de diez idiomas. En sus estanterías están los casi 500 libros que los clientes se han dejado en el hotel tras su estancia en las habitaciones. Todo comenzó hace unos años, cuando comenzaban a acumularse los libros en la sección de objetos olvidados. Al principio, si nadie los reclamaba, se los llevaban los propios empleados. Pero después surgió esta original idea que ya se ha hecho famosa entre los clientes. Tanto es así que muchos de los huéspedes ceden amablemente sus libros cuando conocen la anécdota.
Esta Olvidoteca tiene también otra característica muy especial: si alguien quiere llevarse alguno de los libros puede hacerlo sin ningún problema, porque el hotel lo regala al huésped que lo desee. Así, si alguna vez te alojas aquí y no tienes lectura de cabecera siempre puedes echar un ojo a los títulos que se han quedado olvidados y comenzar a leerlo. Si te quedas con la lectura a medias cuando tengas que marcharte, siempre puedes llevártelo para acabarlo.
La verdad es que me parece una idea estupenda para fomentar la lectura y además, dar utilidad a esas historias que se quedan en los cajones de las mesitas de noche, en las sábanas o bajo las camas.
