Rafa Nadal ha jugado su primer partido en el Masters 1000 de Roma y se ha demostrado que no está fino, que el número uno del mundo tiene una presión muy grande sobre sus hombres y en estos momentos no la está sabiendo soportar. El tenista balear sabe que la derrota en la final de Madrid no fue la mejor de su carrera, y no por perder un Masters 1000, sino porque perdió ante Novak Djokovic, y eso significa que le ha dado vida a un rival que no sabía ganarle sobre tierra batida.
El tenista español sufrió en exceso para ganar a un rival como Lorenzi, estaba claro que el italiano estaba crecido por estar en su tierra y porque los aficionados estaban animando como auténticos tiffosis, pero Nadal no fue el de otras ocasiones. De hecho, el número uno del mundo dejó escapar el primer set en el tie-break., aunque en el segundo set tuvo la tranquilidad de un campeón cuando iba 4-3 abajo.
Al final, Nadal supo reaccionar y comió a Lorenzi, pero el español tendrá que cambiar para conseguir no perder el número uno del mundo en Roma, y es que como mínimo tiene que llegar a semifinales.