La situación en Gaza se ha convertido en un escenario de desesperación y sufrimiento extremo, donde decenas de miles de vidas se han perdido y cientos de miles más se encuentran al borde de la hambruna, como advirtió este miércoles el comisionado general de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, durante una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU centrada en el conflicto de Medio Oriente.
Lazzarini describió a Gaza como un «cementerio» en un mar de escombros, donde una gran parte de la población está desplazada y los niños viven en un estado de horror constante debido a la violencia. En su informe, subrayó la grave situación que enfrentan los menores, quienes crecen en un entorno de conflicto y son víctimas de asesinatos y heridas, así como de la pérdida de sus padres. Además, alertó sobre la interrupción de la educación, con los niños gazatíes sin poder asistir a la escuela durante dos años, lo que podría tener consecuencias devastadoras en su desarrollo y en la futuras generaciones.
El comisionado general abordó la actual ofensiva militar israelí en el norte de Gaza y las intolerables condiciones de vida que persistían en el sur. Afirmó que el año ha estado marcado por «profundas pérdidas y sufrimiento», recordando que la violencia sigue en aumento y que los rehenes capturados permanecen en cautiverio tras los ataques iniciales de Hamás.
A pesar del clima de inseguridad, el personal de UNRWA sigue trabajando en medio de circunstancias extremas. Según Lazzarini, 226 empleados de la agencia han perdido la vida mientras intentan proporcionar asistencia humanitaria en un contexto de agresiones directas y órdenes de evacuación de Israel que complican aún más sus esfuerzos.
El comisionado también se expresó con preocupación sobre proyectos de ley en Israel que podrían desmantelar la UNRWA y despojarla de su inmunidad, advirtiendo que estas acciones no solo violarían el derecho internacional humanitario sino que también sentarían un precedente peligroso para otros conflictos en el mundo.
Además, Lazzarini hizo un llamado urgente al Consejo de Seguridad para que tome medidas decisivas contra lo que considera una embestida a los principios del multilateralismo y una amenaza para la paz internacional. Reiteró la necesidad de detener los intentos de desmantelar la UNRWA, un organismo esencial en la falta de una solución política viable.
En la misma sesión del Consejo de Seguridad, Lisa Doughten, directora de Finanzas y Alianzas de la Oficina de Ayuda de Emergencia (OCHA), destacó el sufrimiento inimaginable que ha enfrentado Gaza, señalando que muy pocas veces en la historia reciente se ha presenciado tal magnitud de destrucción. Lamentó que las condiciones humanitarias han empeorado, afectadas por órdenes de evacuación que han llevado al desplazamiento del 90% de la población gazatí.
Doughten enfatizó que estas órdenes, aunque se justifican como medidas para proteger a los civiles, han creado un ambiente de inseguridad total. Además, reportó restricciones severas en la entrada de suministros esenciales y el acceso humanitario, lo que está generando una situación crítica de trauma y hambre entre la población.
El mensaje de urgencia es claro: se necesitan esfuerzos diplomáticos inmediatos para lograr un alto el fuego y establecer un camino hacia una paz duradera en la región, con el objetivo de poner fin a las atrocidades y el derramamiento de sangre que han marcado este conflicto.
Fuente: ONU últimas noticias