Uno de los momentos más dramáticos y peligrosos del Gran Premio de Hungría tuvo lugar cuando, en las últimas vueltas, Michael Schumacher cerró peligrosamente en la recta de meta a Rubens Barrichello, produciéndose lo que tienes en la imagen superior.
El resultado fue que el piloto brasileño estuvo a muy poco de chocarse contra el muro a más de 300 kilómetros por hora, lo que habría resultado también en un impacto severo de cara al heptacampeón, y los daños podrían haber sido muy, muy graves. No obstante, no pasó nada… por muy poco.
La cuestión es que la FIA ya ha dado a conocer la sanción para Michael -justa para unos, no tanto para otros-, y se traduce en que independientemente de su posición en la clasificación, Schumacher saldrá diez puestos por detrás de su clasificación, en el circuito de Spa-Francorchamps. ¿Qué te parece? ¿Justa decisión, o no?
Vía: GP Update