Los conflictos en Medio Oriente y el Norte de África han dejado una profunda huella en los más jóvenes, con más de doce millones de niños afectados en los últimos dos años. Según el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), esta situación ha llevado a un alarmante estado de vulnerabilidad, con 110 millones de niños viviendo en países marcados por la guerra, donde muchos hogares, escuelas e instalaciones sanitarias han sido dañados o destruidos.
Edouard Beigbeder, director regional de UNICEF para Oriente Medio y el Norte de África, destacó que “la vida de un niño sufre un vuelco cada cinco segundos debido a los conflictos en la región”. Ante este escenario, se estima que para 2025, 45 millones de niños necesitarán ayuda humanitaria, lo que representa un aumento del 41% en comparación con 2020.
La situación es aún más preocupante si se analiza la financiación destinada a programas vitales en esta área. En mayo, Siria enfrentaba un déficit de financiación del 78%, mientras que el Estado de Palestina tenía un déficit del 68% para sus llamados de apoyo en 2025. Asimismo, los programas de UNICEF para la región están bajo una intensa presión financiera, y se prevé una disminución en la financiación de entre un 20% y un 25% para 2026, lo que podría resultar en un déficit de hasta 370 millones de dólares.
Estos recortes amenazan programas esenciales que salvan vidas, que incluyen el tratamiento de la desnutrición grave, la producción de agua potable en zonas de conflicto y la vacunación contra enfermedades mortales. “A medida que empeora la situación de la infancia en la región, los recursos para responder son cada vez más escasos”, advirtió Beigbeder.
El llamado a la acción es urgente: “Hay que poner fin a los conflictos. La defensa internacional para resolver estas crisis debe intensificarse. Y el apoyo a los niños vulnerables debe aumentar, no disminuir”. Esta es una tarea que requiere la atención y el compromiso de la comunidad internacional para garantizar un futuro más esperanzador para millones de niños atrapados en situaciones desesperadas.
Fuente: ONU últimas noticias