El 8 de julio, General Atomics Aeronautical Systems, Inc. (GA-ASI) y General Atomics Integrated Intelligence, Inc. (GA-Intelligence) llevaron a cabo una significativa demostración que marcó un avance en la integración de tecnologías autonómicas para misiones militares. Durante el evento, se demostraron capacidades de la cadena de muerte de largo alcance, incluyendo un compromiso aire-aire autónomo, utilizando un MQ-20 Avenger® que operó en un ambiente de control de emisiones de sensores (EMCON) mediante el Ecosistema Central de Autonomía Táctica (TacACE).
La demostración destacó la fusión de sensores a nivel local y global, proporcionando a la aeronave acceso a una conciencia situacional en tiempo real. La integración de un Avión de Combate Colaborativo (CCA) junto con el comando y control más allá de la línea de visión (BLOS) permitió el control autónomo del MQ-20, que fue gestionado a través de nodos C2 distribuidos. Esta operación se vio facilitada por el software Optix.C2 de GA-Intelligence, que habilita una función de comando y control de baja latencia, conectando diversas plataformas en un entorno de red más amplio.
El Dr. Brian Ralston, presidente de GA-Intelligence, celebró la colaboración destacando que «la demostración ilustra el valor de integrar tecnologías de vanguardia en toda la empresa», una afirmación respaldada por la exitosa combinación de detección espacial y táctica durante el vuelo. Esto permitió que la aeronave identificara y respondiera a amenazas en tiempo real, mejorando la capacidad de toma de decisiones autónoma.
Una parte esencial de la demostración fue la utilización del MQ-20 para patrullar de manera autónoma una zona de Patrulla Aérea de Combate (CAP). En esta misión, el dron utilizó sensores externos para enviar información a los operadores sobre objetivos de interés, permitiendo la orden de iniciar un enfrentamiento con otros vehículos aéreos sin intervención manual posterior.
Michael Atwood, vicepresidente de Programas Avanzados de GA-ASI, subrayó la importancia de esta demostración al indicar que representa un avance significativo en los sistemas autónomos y las interfaces hombre-máquina. Según Atwood, «este es el futuro de la guerra: sistemas escalables y autónomos que permiten al combatiente dominar a distancia».
GA-ASI sigue desarrollando tecnologías de autonomía que facilitan un comportamiento colaborativo de las aeronaves con mínima intervención del operador. Estas innovaciones no solo amplían la oferta de capacidades de la compañía, sino que también refuerzan su compromiso con ofrecer soluciones eficaces y adaptables en el ámbito militar global.