La antorcha Olímpica sufrió en el día de ayer un problema que hizo que se apagara en mitad del recorrido. A pesar de que esto suele suceder alguna vez en cada edición de los Juegos Olímpicos, siempre suele llamar mucho la atención de las personas.
El infortunio de ver como se apagaba la llama de la antorcha cayó en el figura del atleta paralímpico de badminton David Follett, que hacia el relevo en su silla de ruedas en Great Torrington, y a eso de las nuevo de la mañana hora local, veía como el fuego se consumía del pebetero, a causa de un problema con el quemador de la antorcha, según han notificado el Comité Olímpico Británico.
Esta situación es normal que ocurra, ya que puede apagarse por muchos motivos, como puede ser una ráfaga de viento o una lluvia incesante. En este caso el problema ha estado en la antorcha, por lo que se ha tenido que cambiar por otra de repuesto que iba subida en uno de los coches que acompañan a cada relevista, la cual ha sido encendida del fuego madre que se trajo de Grecia la semana pasada y que se conserva en un recipiente especial para cuando ocurre este tipo de situaciones.
Una vez encendida la antorcha, esta ha seguido su camino previsto por la organización y hoy seguirá pasando de mano en mano hasta llegar a su meta, que no es otra que el Estadio Olímpico se Londres en día 27 de Julio, cuando se procederá al encendido del pebetero que estará activo durante todos los días que dure la competición.