Rocio Sampere, Presidenta de la Asociación Madrileña de Mediación y Directora del Máster TFP de UNIR, ha compartido su satisfacción tras la reciente aprobación en el Congreso del Proyecto de Ley Orgánica de Medidas en Materia de Eficiencia del Servicio Público de Justicia. Esta legislación, que recibió luz verde el 19 de diciembre de 2024, establece como requisito previo la utilización de un mecanismo alternativo de resolución de conflictos (MASC), en particular la mediación, antes de acudir a los tribunales.
La Asociación Madrileña de Mediación (AMM) ha señalado que esta normativa representa un gran avance hacia la promoción de la resolución extrajudicial de conflictos, un objetivo que han perseguido desde su fundación. Sampere destacó la participación activa de la AMM en el Foro de Mediación del Ministerio de Justicia y en diversas iniciativas colaborativas con universidades y otras entidades, con el fin de fomentar métodos pacíficos y constructivos para resolver disputas.
En el prólogo de la ley, se menciona la intención de devolver el protagonismo al ciudadano, garantizando que tenga acceso a soluciones más rápidas y económicas que los procesos judiciales tradicionales. Según Sampere, esta nueva legislación responde a la necesidad de los ciudadanos del siglo XXI, que buscan un sistema que los apoye en lugar de reemplazarlos.
Asimismo, Sampere celebró que este paso se alinea con las recomendaciones de derecho comparado en materia de justicia impulsadas por Europa desde 2008, buscando una justicia más ágil y accesible. La ley no solo promueve la mediación, considerado el sistema «estrella» desde su regulación en 2012, sino que también reduce la adversarialidad y fomenta la colaboración entre las partes en conflicto.
La legislación establece que antes de iniciar procedimientos judiciales, se debe intentar resolver el conflicto a través de un método alternativo de forma de buena fe, bajo pena de condena en costas si no se realiza este intento. Además, se introduce el concepto de «abuso del servicio público de justicia», sancionando acciones dilatorias sin justificación.
La mediación, como un método autocompositivo, permite que las partes, con la ayuda de un mediador neutral y especializado, lleguen a un acuerdo adaptado a sus necesidades. Este proceso es voluntario y confidencial, con la flexibilidad de decidir aspectos como el lugar y el tiempo de la mediación.
Desde la AMM se reitera el compromiso para implementar esta ley y para promover métodos de resolución de conflictos de calidad, asegurando que los ciudadanos reciban información adecuada y acceso seguro a estos procedimientos. Las mediaciones más solicitadas abarcan áreas como la familia, la educación, el ámbito laboral y la sanidad. En este sentido, la AMM continúa trabajando para ofrecer servicios de máxima calidad y acompañar la transformación del sistema judicial hacia una mayor eficiencia.
