La cocina de Almazán ha vuelto a brillar en el ámbito de la gastronomía medieval gracias a la destacada participación de Julia Medrano, chef del Hotel Villa de Almazán. En el reciente concurso de pinchos y tapas medievales, celebrado durante los dos últimos fines de semana coincidiendo con las festividades del carnaval, Julia se alzó nuevamente con el premio máximo con su creación titulada ‘La vida es un carnaval’.
Medrano, una chef con una vasta trayectoria en este certamen, ha sido participante activa en todas las 21 ediciones celebradas hasta la fecha, convirtiéndose así en un símbolo de la cultura culinaria local. Su pincho ganador de este año presenta una creativa fusión de sabores del mar y la huerta, combinando una base de fina masa de pan con bogavante, un bacalao al pilpil, brotes tiernos de cebolla, una emulsión de vino y un toque decorativo de setas de temporada.
La chef ha compartido que, a diferencia de sus anteriores propuestas que usualmente requieren una cuidadosa preparación, este año la idea le surgió de forma casi instantánea. «Me ha salido a la primera», afirma, con una evidente satisfacción que se refleja en su expresión. Habiendo conseguido una vez más el reconocimiento del público, Julia se siente confiada en que su especialidad, el bacalao, ha sido clave para cautivar a los asistentes. «Aquí, el bacalao gusta mucho», señala, resaltando su popularidad en la zona.
El galardón fue entregado por Teresa Ágreda, concejala de Cultura, Patrimonio, Festejos y Deportes del Ayuntamiento de Almazán, en un acto que celebró el esfuerzo y la dedicación de los participantes. Este triunfo no solo representa un nuevo laurel en la carrera de Medrano, sino que también le permite seguir siendo embajadora de la gastronomía de Almazán, ya que competirá por sexta vez en el Concurso Internacional de Pinchos y Tapas Medievales, una prestigiosa cita que se llevará a cabo en la misma villa soriana, donde se reunirán los mejores talentos del sector gastronómico de diversas localidades de España y Portugal.
El concurso, que fomenta el uso de ingredientes precolombinos en la elaboración de los pinchos, pone en relieve la riqueza de la cocina tradicional y las capacidades creativas de sus chefs, quienes están invitados a emplear técnicas modernas. Julia Medrano, con su espíritu competitivo y pasión por la cocina, continúa siendo una figura central en la promoción de la cultura gastronómica de su querido Almazán.
