El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha aprobado recientemente una resolución que declara que Irán no está cumpliendo con sus obligaciones en materia de no proliferación nuclear. Este voto, que tuvo lugar el jueves con 19 votos a favor, tres en contra y once abstenciones, sigue a las preocupaciones expresadas por el director del OIEA, quien advirtió sobre la incapacidad de los inspectores para verificar si el programa nuclear iraní tiene fines pacíficos, tal como se estableció en el acuerdo nuclear de 2015, del cual Estados Unidos se retiró.
La situación se torna aún más complicada con la inminente reanudación de las negociaciones entre Washington y Teherán, que comenzarán el sábado en Omán. Estas conversaciones se desarrollan en un contexto de creciente tensión geopolítica, especialmente con los rumores sobre un posible ataque israelí a instalaciones nucleares en Irán.
Tras la aprobación de la resolución, el organismo de energía atómica iraní anunció su intención de abrir una nueva planta de enriquecimiento de uranio, lo que despertó nuevas alarmas en la comunidad internacional sobre el potencial de desarrollo de armas nucleares. El texto de la resolución subraya la falta de cooperación de Irán con los inspectores de la ONU desde 2019, y detalla que el país no ha podido explicar la presencia de partículas de uranio en lugares no declarados.
Rafael Grossi, director general del OIEA, expresó su frustración ante la falta de respuestas técnicas creíbles de Irán a las preguntas planteadas. Además, mencionó que Teherán ha almacenado 400 kilogramos de uranio altamente enriquecido, lo cual es motivo de preocupación por las implicaciones de proliferación que esto conlleva. La situación actual marca un nuevo nivel de tensión en la relación entre Irán y la comunidad internacional, dejando en suspenso la posibilidad de una solución pacífica.
Fuente: ONU últimas noticias
