Aunque cuando elegimos los terminales móviles lo hacemos en base a muchas cosas, aquellos que son unos manitas a la hora de reparar cualquier problema que se pueda producir con ellos, casi siempre se fijan en el aspecto de que esos terminales sean fáciles de reparar; es decir, que las piezas sean accesibles y que su montaje no requiera de grandes aptitudes técnicas. Y si hay un estándar a la hora de conocer cuánto de difícil es reparar un terminal, ese es sin duda iFixit.
Y ahora los desarrolladores de iFixit se han lanzado a contarnos que hay detrás de la última apuesta de los smartphones de HTC, el HTC One, el cual parece que no está por la labor de ofrecernos una gran facilidad a la hora de reparar sus piezas. Y es que el teléfono móvil es de los más complicados a la hora de ser reparado por el usuario y se lleva un mero 1/10, o sea, que es la puntuación más baja que podría obtener y aunque no es el primero en quedarse con un número tan bajo, es verdad que no ayuda en nada a los que piensen en comprar un nuevo teléfono teniendo en cuenta esta característica.
Esa misma puntuación que iFixit ofrece sobre el HTC One, ese 1/10 la obtiene el Microsoft Surface, y solo un punto por encima, de 2/10 se la otorgaron al Macbook Retina de 13 pulgadas, con lo que podríamos decir que varias empresas de las grandes comienzan a olvidar eso de hacerse accesibles a los usuarios. Aunque claro, eso supone acudir si o si a su servicio técnico, y el dinero que éste cuesta… Cuestión de prioridades.
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