Hondarribia, un encantador municipio de Gipuzkoa, se ha convertido en la capital de la gastronomía histórica en la península ibérica, albergando hasta el próximo 1 de junio la ruta del pintxo medieval. En el marco de la Feria Medieval, el Ayuntamiento ha organizado el XVI Concurso de Pintxos Medievales, en colaboración con la Red de Ciudades y Villas Medievales.
Participan ocho bares de la localidad, todos ellos compitiendo por el título de Mejor Pintxo Medieval. La singularidad de este certamen radica en que los ingredientes utilizados en las creaciones deben ser todos anteriores a 1492, lo que significa que productos como el tomate, la patata, el maíz o el pimiento quedan fuera de la lista. Este requisito invita a los chefs a desplegar su ingenio, creatividad y respeto por la tradición culinaria.
Los pintxos que se presentan en esta competencia son verdaderas joyas de la gastronomía local. Cada establecimiento ha creado una propuesta única, destacando la diversidad de sabores de la era medieval. Ejemplo de ello es el pintxo «Ekintza» del equipo Batzoki, que combina manzana, castaña, hongos, huevo y estofado de ciervo. Desde Gastroteka Tatapas, el chef Adur Arrieta sorprende con «Aizkolari», un falso tronco de garbanzo relleno de molleja a la brasa y manzana a la sidra. También destaca «Delicias de Bufón» del bar Danontzat, que ofrece carne curada sobre tosta, cecina crujiente y setas silvestres.
El certamen no solo cuenta con un jurado profesional que evaluará las propuestas, sino que se ha establecido un Premio del Jurado Popular. Los visitantes pueden participar mediante un sistema de votación, lo que les brinda la oportunidad de ganarse una degustación de pintxos y bebidas. Para votar, deben sellar al menos tres pintxos distintos en su folleto y depositar el cupón en los bares participantes o en las oficinas de turismo antes de la fecha límite.
La participación en este concurso no solo eleva la reputación culinaria de Hondarribia, sino que también añade un atractivo extra a la Feria Medieval, que se celebrará el 7 y 8 de junio. Durante este evento, la ciudad se llena de mercados, animación de calle y actividades culturales que celebran su rica historia.
Hondarribia está demostrado ser un destino indispensable para los amantes de la gastronomía, combinando su belleza costera y su patrimonio histórico con una propuesta culinaria vibrante que respeta sus raíces. Este fin de semana, la localidad invita tanto a residentes como a visitantes a disfrutar de un auténtico festín medieval que promete deleitar los sentidos y ofrecer una experiencia única.
