Isabelle Huppert es una de las actrices más aclamadas por la crítica cinematográfica. Por sus irreverentes interpretaciones, ha sido calificada como “la psicópata más adorada del cine francés».
Y es que, en sus treinta años de carrera, sus papeles han desafiado todos los tabúes que, de acuerdo al psicoanálisis y la antropología clásica, conforman la civilización. Tal es el caso de una madre que se masturba mientras abraza a su hijo («Ma mère»), una profesora de piano que se corta los genitales con una rasuradora («La pianiste») o una criada que asesina a sangre fría a una familia entera («La Ceremonie»).
La búsqueda del cuestionamiento de las pautas sociales es una constante en la filmografía de Huppert: “¿Cuál es el punto de hacer films si no generan un estado de shock?”, declaró en una entrevista al Telegraph.
«Home», opera prima de la directora y guionista suizo-francesa Ursulla Meier, es uno de los últimos largometrajes protagonizados por Huppert. Para aquellos que se acercaron a relatos de Julio Cortázar, inevitablemente encontrarán las resonancias de “La autopista del sur” y “Cartas a una señorita en París”.
Un matrimonio y sus tres hijos viven en las proximidades de una autopista abandonada hace diez años. Cuando la obra es retomada y comienzan a circular los primeros automóviles, el equilibrio familiar se ve trastocado por los fenómenos de la ciudad moderna: la polución, el ruido y la velocidad.
El drama de una familia obligada a privatizar su espacio resulta una magnífica metáfora de nuestro tiempo y su esquizofrenia.
