Tomiwa Ilori, experto en derechos digitales y analista de políticas, ha compartido su perspectiva sobre la libertad de expresión en una reciente entrevista. Ilori, quien es asesor del B-Tech Africa Project en la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, destaca la importancia de la libertad de expresión en la vida humana, comparándola con el oxígeno. Según él, esta libertad no solo es un derecho, sino una parte intrínseca de nuestra existencia, algo que todos necesitamos para vivir plenamente.
Originario de Nigeria y miembro de la comunidad yoruba, Ilori menciona cómo su trasfondo cultural ha influido en sus creencias sobre la libertad de expresión. Utiliza proverbios yorubas para ilustrar su punto de vista; por ejemplo, menciona que es un derecho innato de cualquier ser humano expresarse, y que la censura es inherentemente opresiva.
Ilori también compartió experiencias personales con la censura. Recordó cómo, en Kampala, tuvo que pagar un impuesto para acceder a Internet, lo cual él considera una forma de censura que limita a aquellos que no pueden permitírselo. Además, narró una reciente experiencia de un apagón de Internet durante protestas en Nairobi, lo que lo llevó a comprender visceralmente el impacto de la censura digital.
Ante la pregunta sobre si alguna vez es justificable un apagón de Internet, Ilori fue firme en su respuesta negativa, argumentando que tales decisiones son más una manifestación de la incapacidad de los gobiernos para abordar problemas subyacentes. Según él, los actores estatales utilizan excusas como la lucha contra el odio o la desinformación para justificar restricciones que, en última instancia, no son proporcionales y a menudo violan los derechos humanos.
En cuanto a la regulación de la desinformación, Ilori sostiene que, aunque los actores estatales tienen un papel, la solución no debe ser exclusivamente legal. Propugna un enfoque de múltiples partes interesadas que incluya educación y medios de comunicación, así como el fortalecimiento de la capacidad de los periodistas. En su experiencia, la criminalización de la desinformación ha llevado a la represión de periodistas y defensores de derechos humanos.
Ilori también enfatiza la responsabilidad de las empresas tecnológicas: deben respetar los derechos humanos y no solo centrarse en sus beneficios económicos. En su opinión, es esencial que estas plataformas se involucren activamente en la lucha contra el daño en línea y trabajen de la mano con actores estatales y de la sociedad civil.
Finalmente, Ilori menciona que uno de los problemas más urgentes en su región es el uso indebido de leyes para silenciar voces y restringir la libertad de expresión. Para él, figuras como Fela Kuti, un músico que se convirtió en un símbolo de la resistencia cultural en Nigeria, representan el poder de la expresión libre frente a la opresión. Fela no solo usó su música para desafiar a los líderes autoritarios, sino que se convirtió en un faro de esperanza y un modelo a seguir para muchos activistas en la actualidad.
Fuente: EFF.org