El Secretario General de la ONU, António Guterres, reiteró su urgente llamado a un alto el fuego en Gaza, así como a un mayor acceso humanitario y la liberación de todos los rehenes, en medio de una nueva escalada de violencia en la región. Durante una conferencia de prensa en Nueva York, Guterres destacó que los recientes movimientos militares de Israel en la Ciudad de Gaza representan una fase peligrosa en el conflicto.
“Los pasos iniciales de Israel para tomar militarmente la Ciudad de Gaza marcan una nueva y peligrosa fase”, afirmó Guterres. Destacó que las operaciones militares en la zona tendrán consecuencias devastadoras para los civiles, quienes, ya exhaustos y traumatizados, podrían verse obligados a huir nuevamente, poniendo en peligro a más familias.
El Secretario General también comentó sobre la situación crítica que atraviesa Gaza, describiéndola como una “tragedia en desarrollo” marcada por “más ataques israelíes inconcebibles”. Entre los incidentes recientes, mencionó dos bombardeos en el Hospital Nasser en Khan Younis, que resultaron en la muerte de civiles, incluido personal médico y periodistas, evidenciando la gravedad de la situación con “todo el mundo mirando”.
Guterres expresó su preocupación por el rumbo que ha tomado el conflicto: “Gaza está llena de escombros, llena de cuerpos, y llena de ejemplos de lo que pueden ser graves violaciones del derecho internacional”. Además, hizo un llamado a la rendición de cuentas y subrayó que el trato hacia los rehenes también debe cambiar, instando a su liberación inmediata.
El Secretario General subrayó que “la hambruna ya no es una posibilidad inminente: es una catástrofe actual”. Los sistemas de alimentación, agua y atención médica en la región han sido desmantelados, provocando un sufrimiento extremo entre la población.
Guterres enfatizó las obligaciones de Israel, como potencia ocupante, para garantizar el suministro de alimentos, agua y medicinas. Estas obligaciones, según él, son clave para la protección de los civiles y la infraestructura civil en Gaza. También destacó que la Corte Internacional de Justicia ha emitido medidas provisionales que deben ser implementadas de inmediato, exigiendo un acceso humanitario sin restricciones.
En el contexto de la ONU, Guterres lamentó la pérdida de 366 miembros del personal en medio de la crisis, afirmando que los esfuerzos de ayuda son frecuentemente bloqueados, lo que considera inaceptable.
La situación se extiende también a Cisjordania, donde Guterres describió las operaciones militares, la violencia de colonos y la expansión de asentamientos como profundamente alarmantes, ya que están provocando desplazamientos y aumentando la vulnerabilidad de las comunidades.
El Secretario General concluyó sus declaraciones enfatizando que no existe una solución militar al conflicto e insistiendo en la necesidad de un alto el fuego inmediato y permanente. “El hambre de la población civil nunca debe usarse como método de guerra. No más excusas. No más obstáculos. No más mentiras”. La crisis en Gaza y Cisjordania sigue en curso, y la comunidad internacional observa con creciente preocupación.
Fuente: ONU últimas noticias