El Secretario General de la ONU, António Guterres, ha expresado su satisfacción por el inicio del alto el fuego y la liberación de rehenes en Gaza, medida que fue implementada este domingo. Esta tregua se produce tras más de 15 meses de un conflicto devastador en la región. Guterres subrayó la disposición de la Organización para apoyar la implementación del alto el fuego y garantizar una entrega continua de ayuda humanitaria a la población palestina, que sigue sufriendo las consecuencias del conflicto. Sin embargo, advirtió sobre la necesidad de eliminar los obstáculos políticos y de seguridad que todavía dificultan la entrega de asistencia.
En el contexto del acuerdo, tres rehenes israelíes fueron liberados y entregados a la Cruz Roja, quienes los trasladaron de regreso a Israel. Se prevé que Israel libere a un número aproximado de 90 prisioneros palestinos. Este alto el fuego, fruto de negociaciones entre Qatar, Egipto y Estados Unidos, se dividirá en tres fases, siendo la primera de seis semanas y contemplando la liberación de prisioneros y un aumento en la ayuda humanitaria.
Más de 630 camiones de ayuda humanitaria fueron enviados a Gaza, con al menos 300 de ellos dirigidos al norte del territorio. A pesar de los desafíos logísticos que enfrentan los equipos humanitarios, Tom Fletcher, responsable de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, aseguró que la seguridad de los civiles y los trabajadores humanitarios es una prioridad fundamental.
Numerosos palestinos desplazados comenzaron a regresar a sus hogares para evaluar los daños tras el alto el fuego. Shadi Jumaa Abu Sheha, quien regresó a Nuseirat, encontró su vivienda en ruinas, aunque expresó alivio por la cesación de hostilidades. A pesar de la destrucción, agradeció que su familia haya sobrevivido ilesa.
El Programa Mundial de Alimentos también inició el envío de ayuda, con el objetivo de evitar una crisis de hambre en la región. Cindy McCain, directora ejecutiva del programa, enfatizó la necesidad de mantener abiertos todos los pasos fronterizos para garantizar el flujo de asistencia.
Mientras tanto, la Organización Mundial de la Salud advirtió sobre los desafíos sanitarios que se avecinan tras el conflicto. Más de 46.600 personas han muerto y aproximadamente 110.000 han resultando heridas, muchas de ellas con lesiones permanentes. La OMS planea implementar un plan de 60 días para abordar la atención sanitaria de emergencia en Gaza.
Por su parte, ONU Mujeres celebró el alto el fuego, destacando la necesidad de incluir a mujeres y niñas en los esfuerzos de reconstrucción y en la promoción de la paz. La directora ejecutiva del organismo expresó su esperanza de que la tregua represente un cambio positivo para aquellas que han vivido bajo condiciones extremas en Gaza. A pesar de los pasos hacia la recuperación, Vaticano reiteró la urgencia de mantener el alto el fuego y asegurar un acceso humanitario eficaz.
Fuente: ONU últimas noticias
