Las preocupaciones humanitarias en Sudán se intensifican debido a la crítica situación que enfrentan decenas de miles de personas atrapadas en El Fasher, en la región de Darfur. Desde que combatientes paramilitares tomaron la ciudad en octubre, las condiciones han empeorado drásticamente, con el programa de la ONU alertando sobre la escasez total de insumos esenciales para la supervivencia.
Ross Smith, director de Preparación para Emergencias y Respuesta del Programa Mundial de Alimentos (PMA), informó que entre 70,000 y 100,000 personas podrían estar sufriendo en la ciudad. Los asedios prolongados han llevado a los habitantes a recurrir a alimentos inusuales, como cáscaras de maní y comida para animales, mientras que imágenes satelitales reflejan la macrosituación de violencia, incluyendo asesinatos masivos.
El acceso humanitario a El Fasher sigue siendo una prioridad para las agencias de ayuda, que enfrentan dificultades de comunicación debido a apagones en la red. Los sobrevivientes describen la ciudad como una “escena del crimen”, llena de cadáveres y mercados abandonados. Smith informó que, tras recientes conversaciones, se espera que las Fuerzas de Apoyo Rápido permitan la entrada de equipos de ayuda para realizar evaluaciones iniciales.
Quienes han logrado escapar de El Fasher enfrentan además rutas peligrosas y minadas, encontrando refugio en localidades como Tawila, que ha crecido exponencialmente hasta convertirse en un asentamiento masivo para más de 650,000 personas. En este lugar, la situación es crítica, con condiciones de hacinamiento y riesgo de brotes de enfermedades como el cólera.
La crisis en Sudán se ha convertido en la mayor crisis de desplazamiento del mundo, con más de 12 millones de personas desarraigadas. La situación en Kordofán también ha empeorado, con nuevos combates y un control formado por fuerzas armadas, haciendo aún más complicada la huida de ciudadanos vulnerables. A pesar de los esfuerzos de ACNUR y otros organismos, el acceso a las áreas necesitadas es extremadamente complicado, y los recursos se están agotando rápidamente.
Fuente: ONU últimas noticias





