Hacía treinta y seis años que ningún español había conseguido levantar un trofeo sobre una pista de hierba, pero esta temporada hemos visto a dos españoles conseguirlo, y ahora afrontan con más ilusión el difícil reto del torneo inglés de Wimbledon.
Cuando todavía no hemos asimilado el estado de forma de Nadal sobre la hierba, nos hemos encontrado que David Ferrer está también en un gran momento de forma, consiguiendo levantar su primer trofeo sobre este tipo de pista, y es que ganó en el torneo holandés de Hertogenbosh.
El tenista alicantino pudo vencer en la final al francés Marc Gicquel, consiguiendo el segundo torneo de la temporada, en dos sets, 6-4 y 6-2, en un encuentro que el español dominó en todo momento y no le pesó la responsabilidad de ser el cabeza número uno y máximo favorito en la final.