Una encuesta reciente realizada por Rentokil Initial ha puesto de manifiesto un grave desconocimiento entre las mujeres españolas sobre su derecho a acceder a productos de higiene menstrual de forma gratuita en espacios públicos. Según los resultados, el 71% de las encuestadas no está al tanto de esta normativa, que se estableció a raíz de la modificación de la Ley Orgánica 2/2010, referida a la salud sexual y reproductiva.
El estudio, realizado con una muestra de 1.000 mujeres de entre 16 y 50 años, detalla que el 46,15% ha enfrentado la situación de necesitar productos de higiene menstrual sin tener acceso a ellos en espacios públicos. A través de esta investigación, llevada a cabo entre el 23 y el 25 de abril de 2025, se buscó evaluar el conocimiento y la percepción de las mujeres sobre su derecho a la gratuidad de estos productos en centros educativos, hospitalarios y sociales, así como en penitenciarias.
La modificación legislativa busca garantizar la disponibilidad de productos de higiene íntima sin necesidad de intermediación, protegiendo la privacidad de las usuarias. Sin embargo, el alto porcentaje de desconocimiento se traduce en una baja tasa de uso efectivo. Tan solo el 12,69% de quienes necesitaron productos en un espacio público pudieron acceder a ellos. Frente a la falta de disponibilidad, las mujeres han optado por soluciones como pedir ayuda a amigas (58,01%) o buscar farmacias (50,00%), aunque un significativo 23,81% debió regresar a casa y un 11,69% canceló sus planes.
Además, la investigación destaca que un 78,02% de las encuestadas no ha visto dispensadores de productos gratuitos en los lugares donde deberían estar disponibles. En otras áreas, como bares y centros comerciales, este porcentaje asciende al 83,12%. Incluso aquellas que han encontrado dispensadores, menciona que la principal queja es la irregularidad en la cantidad de productos disponibles (47,73%).
A pesar de estas dificultades, la mayoría de las encuestadas respalda la medida: un 64,44% considera que la distribución gratuita de productos de higiene menstrual es «totalmente necesaria». La demanda potencial es alta, ya que cerca de un tercio (29,57%) utilizaría estos productos de forma habitual si se implementara adecuadamente.
Los resultados subrayan la necesidad urgente de concienciar sobre este derecho y mejorar la visibilidad y accesibilidad de los puntos de dispensación, para que la ley realmente beneficie a las mujeres en su vida cotidiana.