En los últimos años, la influencia de las redes sociales ha transformado las preferencias de los más pequeños, llevando a muchos niños y niñas hacia actividades digitales y estéticas. Durante esta temporada navideña, desde IMC Toys Global han decidido centrar su oferta en productos que no solo entretengan, sino que también estimulen la imaginación y las emociones de los niños.
En una década, se ha evidenciado un cambio notable en los intereses de los más jóvenes. Tradicionalmente, las muñecas, disfraces, juegos de mesa y juguetes de construcción predominaban en las listas de deseos, especialmente entre las niñas. Sin embargo, hoy en día, muchas se inclinan más hacia actividades relacionadas con la estética, como el maquillaje y el cuidado de la piel. Por su parte, los niños, que solían disfrutar de juegos al aire libre y juguetes creativos, ahora pasan más tiempo inmersos en videojuegos y en contenidos digitales.
Este cambio se atribuye principalmente a la exposición constante a internet, redes sociales y medios de comunicación, que presentan modelos y tendencias que los menores tienden a imitar. Esto ha derivado en una mayor atención hacia la apariencia y el contenido digital, en detrimento del juego creativo y la actividad física.
Ante este panorama, es fundamental ofrecer alternativas que promuevan un desarrollo emocional saludable. De cara a la Navidad, padres, educadores y marcas deben unirse para seleccionar juguetes que equilibren la diversión con el aprendizaje, facilitando experiencias que reconecten a los niños con el juego libre y la imaginación.
En este sentido, iniciativas como «La Revolución de los Llorones» de IMC Toys, con sus conocidos Bebés Llorones, se presentan como una solución que reivindica el valor del juego simbólico y emocional. Esta línea de juguetes no solo busca entretener, sino que también fomenta la empatía, la gestión de las emociones y la creatividad, convirtiéndose en una herramienta educativa especialmente relevante en un contexto digital.
Los juguetes ideales para esta Navidad son aquellos que fomentan habilidades cognitivas, emocionales y sociales, estimulando la creatividad, la narración de historias y el movimiento, dejando a un lado las pantallas. Los Bebés Llorones se destacan al combinar entretenimiento con un fuerte componente emocional. En un mundo cada vez más digital, el ofrecimiento de alternativas que apoyen un crecimiento saludable es una responsabilidad de todos, y optar por juguetes que educan puede ser un factor determinante en el desarrollo integral de los niños.
