En 2024, se registraron 1,19 mil millones de viajes personales y profesionales en la Unión Europea, lo que supone un aumento del 4,4% con respecto a los 1,14 mil millones de 2023. De esta cifra, 850 millones correspondieron a desplazamientos internos, lo que representa el 71% del total, mientras que 250 millones fueron viajes al extranjero dentro del bloque, es decir, un 21%. Estos datos revelan que el 92% de los viajes realizados por residentes de la UE fueron intra-EU.
Los países europeos con mayores porcentajes de viajes nacionales fueron Rumanía (90%), España (88%) y Francia, Portugal y Grecia, cada uno con un 85%. En contraste, Luxemburgo registró el porcentaje más bajo, con solo un 5%, seguido por Bélgica (23%) y Malta (35%). Por otro lado, los tres países que más viajes al extranjero realizaron dentro de la UE fueron Luxemburgo (78%), Bélgica (62%) y Malta (48%), mientras que Rumanía, Francia y España registraron las menores proporciones, con un 9%, 9% y 8%, respectivamente.
A pesar de que los viajes domésticos fueron más numerosos, los gastos totales fueron mayores en los viajes al extranjero. En 2024, los residentes de la UE gastaron 257,2 mil millones de euros en viajes nacionales y 360,7 mil millones en desplazamientos internacionales. En los viajes internos, el alojamiento y el transporte representaron más de la mitad de los gastos, con un 33,9% (87,2 mil millones de euros) y un 21,3% (54,8 mil millones de euros) del total. En contraste, para los viajes en el extranjero, se destinó una mayor parte al alojamiento (35,4%; 127,7 mil millones de euros) y al transporte (31,9%; 115,1 mil millones de euros).
La disparidad en los gastos reflejan las diferentes dinámicas de los viajes, donde las experiencias y costos asociados al turismo internacional tienden a ser más altos que en los desplazamientos internos. Estos datos provienen de un informe reciente de Eurostat, que continúa arrojar luz sobre las tendencias de viaje en la región.