El Sevilla se plantó en el Nuevo José Zorrilla sin ganas. Los de Antonio Álvarez volvieron a demostrar, una vez más, que su rendimiento ha bajado mucho. Antes de la destitución de Manolo Jiménez las cosas ya andaban mal en Nervión, pero desde que se fue el de Arahal las cosas no han cambiado mucho. Tampoco se le puede quitar mérito al Valladolid de Clemente, el cual ha cambiado la filosofía del equipo y ha conseguido cuatro puntos en los últimos dos partidos.
El Valladolid tuvo la fortuna de enfrentarse a un Sevilla que jugó a poco o a nada. Fueron los blanquivioletas los que llevaron la batuta durante casi todo el partido. Antes del descanso Diego Costa aprovechó un balón al área de Nauzet Alemán para sellar el primer tanto del encuentro. Se podía esperar una reacción de los andaluces en el segundo periodo, pero siguió siendo el conjunto de Clemente el único equipo sobre el terreno de juego. El segundo llegó tras un error de Cala en el centro del campo que aprovecharon los locales para montar una contra que acabó con gol del angoleño Manucho. De los tres goles que ha marcado esta temporada dos han sido al Sevilla.
Fue entonces cuando despertó el Sevilla. Cala enmendó el error cometido minutos antes con un gran gol desde fuera del área y Navas, candidato al Mundial de Sudáfrica 2010, pudo empatar antes del pitido final, pero el Valladolid se llevó una justa victoria para mantener vivas las esperanzas de la salvación. El Tenerife también venció en el Molinón por lo que la parte de abajo de la tabla está al rojo vivo.
