En el norte de Gaza, la situación humanitaria continúa deteriorándose de manera alarmante. El comisionado general de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), Philippe Lazzarini, ha descrito un escenario devastador en el que «el olor a muerte está en todas partes». Miles de cuerpos permanecen tendidos en las carreteras y bajo los escombros, mientras las misiones de rescate y de ayuda humanitaria son constantemente denegadas. Según Lazzarini, la población se siente «abandonada, desesperada y sola», con un profundo temor a la muerte en cada instante.
A pesar de los intensos bombardeos, algunos refugios de la UNRWA en la región han permanecido abiertos, aunque bajo condiciones extremas. Lazzarini ha solicitado una tregua humanitaria inmediata, aunque sea de corta duración, para permitir que las familias que deseen escapar de la zona lo hagan de manera segura. La ONU estima que más de 60,000 personas se han desplazado desde el norte de Gaza hacia la ciudad de Gaza, y dentro de la misma zona, miles han huido de Jabalia hacia otras localidades cercanas.
La situación se agrava con las informes de personas atrapadas bajo los escombros en Falouja, donde más de 40 individuos, pertenecientes a tres familias, están en grave peligro. A pesar de las peticiones urgentes de la Oficina de Coordinación de la Ayuda Humanitaria de la ONU (OCHA) para enviar ayuda, las autoridades israelíes han rechazado varias solicitudes.
El enviado de la ONU para Oriente Medio, Tor Wennesland, ha estado en Gaza, donde ha constatado la magnitud de la destrucción y el sufrimiento de los ciudadanos. Destacó la urgente necesidad de aumentar la entrada de ayuda humanitaria y de mejorar la seguridad en el enclave, subrayando que los problemas que enfrenta la población incluyen serias violaciones del derecho internacional humanitario. Wennesland reafirmó la necesidad de un alto el fuego inmediato y la liberación de todos los rehenes.
La situación sanitaria también es crítica. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha calificado la situación en el norte de «horrible», con un acceso muy limitado a la atención sanitaria. En un esfuerzo reciente, la OMS logró trasladar a pacientes críticos, aunque enfrentó graves dificultades logísticas debido a los constantes bombardeos y restricciones.
Mientras tanto, en un hecho separado, un bombardeo en el Líbano, cerca del Hospital Universitario Rafik Hariri en Beirut, dejó al menos 18 muertos, incluidos cuatro niños, intensificando aún más la crisis humanitaria en la región. Las agencias de la ONU y ACNUR están trabajando para distribuir suministros esenciales en áreas de difícil acceso como Hasbaya.
El llamado a la acción humanitaria y la necesidad de una solución política en Gaza son cada vez más urgentes, en medio de un conflicto que no parece mostrar signos de cesar.
Fuente: ONU últimas noticias