A tres semanas del paso del huracán Melissa por el Caribe, cerca de 477.000 niños están sufriendo interrupciones en su educación debido a los daños y al cierre temporal de escuelas en Cuba, Haití y Jamaica, según un informe del Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF). Las fuertes lluvias e inundaciones generadas por el huracán han devastado los servicios básicos en las zonas costeras más vulnerables de estos países, lo que ha resultado en el daño o cierre de numerosas instituciones educativas.
Los niños que antes asistían a escuelas dañadas están siendo reubicados en espacios temporales que carecen del equipamiento necesario para una enseñanza adecuada. Roberto Benes, director regional de UNICEF para América Latina y el Caribe, enfatizó que las escuelas no solo son centros de aprendizaje, sino que también ofrecen protección y estabilidad a los menores. Benes advirtió que la interrupción de la educación puede tener un impacto profundo en el aprendizaje y el bienestar de los niños, perpetuando ciclos de desventaja social y económica.
La situación humanitaria en la región es preocupante, con un estimado de 900.000 niños, niñas y adolescentes en condiciones de necesidad, incluidos aquellos que enfrentan retrasos en su educación. Para abordar esta crisis, UNICEF está trabajando con los gobiernos de los países afectados para entregar suministros esenciales y rehacer las escuelas dañadas, con la meta de garantizar un regreso seguro a las aulas lo más pronto posible.
En Cuba, UNICEF ha desplegado suministros destinados a alcanzar a 21.000 estudiantes, incluyendo kits escolares y recreativos, así como materiales para la rehabilitación de escuelas. La organización colabora con el Ministerio de Educación y autoridades locales para mejorar la higiene y el saneamiento en las escuelas y reforzar los espacios de protección infantil.
En Haití, UNICEF se ha coordinado con el Ministerio de Educación Nacional para evaluar las necesidades de las escuelas afectadas y ha entregado 2.800 kits escolares en las zonas más golpeadas. También se distribuyen kits recreativos en Petit Goave, dirigidos a 70 menores afectados por la interrupción de su escolarización.
Por su parte, en Jamaica, la agencia de la ONU ha facilitado materiales didácticos y ha establecido hasta 100 espacios de aprendizaje temporales para apoyar a aproximadamente 10.000 niños en las áreas más impactadas por el huracán. El esfuerzo conjunto busca mitigar las consecuencias de este desastre natural y asegurar que los niños puedan continuar su educación en condiciones seguras y dignas.
Fuente: ONU últimas noticias
