El grupo conocido como los Elders ha solicitado este lunes el fin inmediato de la violencia en Sudán y la República Democrática del Congo, advirtiendo sobre un deterioro humanitario «intolerable» y violaciones sistemáticas de los derechos humanos. En un comunicado, los miembros de este influyente colectivo, que incluye varios Premios Nobel de la Paz y figuras destacadas en la defensa de los derechos humanos, expresaron su preocupación por el sufrimiento de millones de civiles y urge a los líderes regionales e internacionales a actuar con rapidez y responsabilidad.
En cuanto a Sudán, los Elders denunciaron la «abrumadora» evidencia de «crímenes atroces cometidos» en las últimas semanas, particularmente tras el asalto de las Fuerzas de Apoyo Rápido a la ciudad de El-Fasher. El grupo hizo un llamado a todas las partes involucradas y a sus patrocinadores para que cambien de rumbo. En su comunicado también recordaron que ya ha sido declarada la hambruna en el país, donde 21 millones de personas están enfrentando altos niveles de inseguridad alimentaria aguda.
Adicionalmente, hicieron hincapié en la responsabilidad de los actores externos que alimentan el conflicto, instándolos a terminar con cualquier violación del embargo de armas de la ONU y a cumplir con sus obligaciones internacionales. Los Elders pidieron redoblar la presión sobre las partes beligerantes para que acepten la tregua humanitaria de tres meses que ha sido propuesta por un cuarteto mediador conformado por Estados Unidos, Emiratos Árabes, Egipto y Arabia Saudita. Asimismo, recomendaron que se lleven a cabo conversaciones técnicas con la ONU para abordar la desescalada del conflicto y la protección de los civiles.
Con respecto a la República Democrática del Congo, el grupo manifestó estar «profundamente perturbado» por el aumento del costo humano del conflicto, indicando que un cuarto de la población enfrenta inseguridad alimentaria y que casi seis millones de personas se han visto obligadas a desplazarse. En este contexto, señalaron con preocupación el incremento de la violencia sexual, resaltando que una mujer es agredida cada cuatro minutos y un niño cada media hora.
Los Elders instaron también a Rwanda a cesar el fuego de inmediato, retirar sus tropas del territorio congoleño y desmantelar las administraciones paralelas establecidas por el grupo armado M23. Al mismo tiempo, exhortaron al gobierno congoleño a cumplir con su responsabilidad de proteger a la población civil. Si bien reconocieron los esfuerzos de paz impulsados por Estados Unidos, Qatar y la Unión Africana, recordaron que cualquier negociación debe centrarse en la soberanía nacional, los derechos humanos y la justicia, sin someterse a intereses comerciales.
Fuente: ONU últimas noticias





